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Armónicas en Astrología
por Eloy R. Dumon *
* Este artículo fue publicado originalmente en 1982, en la revista Astrología, editada por el Centro Astrológico de Buenos Aires, y reeditado en 1984 por la revista Kepler, Astrología y cultura de Síntesis, nº 4, Madrid. La que aquí presentamos es la versión aparecida en Kepler, al final de la cual figura el término "Continuará", que indica, naturalmente, la existencia de una segunda parte. Parece, no obstante, que el nº 5 de esta revista, donde debía aparecer la anunciada continuación, nunca llegó a publicarse.
Hoy hablaremos acerca de uno de los descubrimientos más importantes y reveladores realizados en astrología en los últimos tiempos, que ha sido considerado dado su envergadura, junto con el Sistema Topocéntrico en materia de domificación de casas, uno de los más grandes adelantos que se hayan llevado a cabo en lo que va del Siglo XX.
El astrólogo inglés, John Addey, que falleció el 27 de marzo de este año en Londres a la edad de 62 años, fue quien descubrió el principio de las armónicas. Con esta disertación quiero rendir mi sincero y cálido homenaje a quien admiré y sigo admirando por su espíritu pionero, brillante, sencillo y desinteresado, y en quien encontré personalmente hace mucho tiempo, apoyo y comprensión.
Es posible afirmar que de las varias investigaciones en astrología que se han llevado a cabo en los últimos años, ninguna es tan dramática y contundente como la de Gauquelin, el estadístico francés; pero desde un punto de vista estrictamente astrológico, no existen otras más informativas y concluyentes que las realizadas por John Addey. Este gran astrólogo decidió investigar allá por la década del 60, las cartas natales de 970 nonagenarios.
Sin entrar en detalles técnicos y al estudiar estadísticamente este grupo de cartas, podemos decir que Addey no encontró evidencias acerca de que los Piscianos -tal como se afirma en los libros de texto-, tengan vida corta ni tampoco de que los Capricornianos tengan vida larga; le pasó algo parecido a lo que le sucedió a Gauquelin cuando descubrió que había igual número de militares nacidos bajo el signo de la paz y del amor, como es Libra, que en los signos marciales de Aries y Escorpio. Y aunque las estadísticas con respecto a la posición en los signos zodiacales resultaron infructuosas, ya que los nonagenarios nada tenian en común, salvo su longevidad, le pareció a Addey que éste solo factor era suficiente para merecer una conexión de alguna manera. Después de mucho tiempo y de analizar la prueba de diferentes maneras, encontró por fin un factor significativo.
Los astrólogos han reconocido durante mucho tiempo una cualidad diferente entre un aspecto aplicativo y otro separativo. Por ejemplo, si en un horóscopo el Sol está en 10º de Libra y Saturno, que es más lento, está en 12º de Libra también, se dice que están en conjunción aplicativa porque el Sol se acerca a Saturno. Pero si las posiciones fueran a la inversa, el aspecto será separativo, porque el Sol se alejaría. Este proceso en astrología es comparable al así llamado efecto Doppler en acústica donde, por ejemplo, la sensación captada por el oído del sonido de una bocina de un móvil que se acerca, no es el mismo del que se aleja, aunque las distancias al oyente sean las mismas. En el fenómeno de la luz sucede lo mismo, y es por este efecto que se sabe cuándo una estrella se aproxima y otra se aleja de la Tierra.
Cuando el aspecto es aplicativo produce tensión, excitación, acción; pero cuando es separativo significa liberación, prolongación, dilatación y es más pasivo. Addey descubrió una impresionante y significativa preponderancia de aspectos separativos en las cartas de los 970 nonagenarios, y aunque nadie habia pensado antes en esto, se puede prever que los nonagenarios compartan una predisposición a conservar la energía, a no gastarla demasiado o cuidando de no arruinar su vitalidad física de alguna manera; y éste es el efecto conferido por el aspecto separativo, de acuerdo con la tradición astrológica.
Pero Addey, desconfiando de que sus estadísticas fueran una casualidad favorable, hizo un experimento más interesante. Trató de probar lo contrario, o sea, buscar un grupo de gente de quienes se podía esperar lo opuesto, es decir una preponderancia de aspectos aplicativos.
Como funcionario de un hospital de enfermos de poliomielitis en Londres, Addey consiguió los datos de nacimiento de un gran número de enfermos (más de 1.000 casos) porque se le ocurrió que si los nonagenarios mostraban una preponderancia de aspectos separativos, entonces las víctimas de polio, opuestos desde el punto de vista del carácter, debían tener preponderancia de aspectos aplicativos. Es un hecho médico conocido que las víctimas de polio poseen una caracterología bien reconocible : son inteligentes, nerviosos y activos. Es raro que el individuo apagado y perseverante contraiga esta enfermedad. Para el astrólogo, esto se relaciona muy bien con los aspectos de Marte-Mercurio, o sea, nerviosidad, estímulo intelectual, excitación; pero también con Saturno, dada su influencia sobre el cerebro, segun las comprobaciones recientes de las estadísticas de Gauquelin efectuadas con miles de científicos saturninos.
Los médicos describen al virus de la polio como de una acción más bien suave o mansa, excepto cuando una misteriosa barrera nerviosa que normalmente es resistente, se rompe o no funciona y el cerebro así debilitado permite la invasión del virus.
La hipótesis de Addey fue confirmada plenamente. Se encontró que los aspectos aplicativos ocurrían con mayor frecuencia que los separativos, o sea, lo contrario a lo que sucedía con los nonagenarios.
Al estudiar las ondas que se formaban en los diagramas de sus cartas, Addey se dio cuenta de su naturaleza recurrente. Es decir, eran ondas que se repetían, y esto era lo significativo. La recurrencia creaba una onda que para la tradición astrológica no era conocida, porque no tenía sentido en términos de un Zodíaco de 12 signos. Al reinterpretar los datos de los poliomielíticos en función de los signos zodiacales, Addey encontró que mientras las divisiones tradicionales en Aries, Tauro, Géminis, etc. no producían ningún resultado positivo, si se dejaban de lado estas divisiones preconcebidas, como compartimentos estancos, y se controlaban las formas ondulantes en cualquier parte que cayeran, emergían distintos modelos. Las víctimas de polio tendían a nacer de acuerdo con la armónica 12, pero con mayor fuerza todavía segun la armónica 120. Veamos el diagrama 1.
DIAGRAMA 1
La armónica 120 se produce multiplicando la posición absoluta del Sol (o sea, desde 0º de Aries) por 120 y restando tantas veces 360º como esté contenido en el número obtenido.
Como ven existen varios ejemplos de la posición del Sol en la determinación de la armónica 120 y, como dijimos, cada 3º se produce el ingreso al 0º de Aries en la armónica 120, que es el caso de un Sol en 3, 6, 9, etc. de cualquier signo.
En lenguaje estadístico, las cartas de Addey indican que un chico que nace con el Sol cada 3º grados de un signo cualquiera (o sea, 3, 6, 9, 12, etc.) está mas predispuesto a contraer la polio que una criatura que nace con el Sol en los dos grados intermedios.
¿Qué significan las estadísticas de Addey? ¿Significa que un astrólogo puede predecir a través de los datos de nacimiento cuál chico tiene más posibilidades de enfermar de polio y cual no? De ninguna manera, lo que quiere decir es que Addey aisló al menos dos factores astrológicos: los aspectos aplicativos y la Armónica 120 en la propensión a la polio, y de este modo abrió un nuevo campo en la investigación astrológica que si se explora profundamente puede producir importantes resultados.
Estas investigaciones revelan que todas nuestras ideas astrológicas fundamentales, como son las de los signos, casas, aspectos, puntos medios, áreas de grados, etc., pueden ser dadas en una forma común de expresión. Addey demuestra que la astrología puede ser definida como "las armónicas de periodos cósmicos", y el término aplicado de "periodos cósmicos", lo utiliza para describir a cualquiera de los ciclos o círculos básicos que usamos en astrología. Por ejemplo, tenemos el ciclo del Zodíaco, el ciclo de las Casas, el de un par de planetas desde su conjunción hasta la próxima conjunción, etc. El término 'armónica' ha sido extraído de la música y de la teoría de las ondas. Una armónica es toda división exacta por un número de una onda o ciclo fundamental. De modo que cuando decimos: la armónica 5, es la división del círculo por el número 5; la armónica 6ª es la división del círculo por el número 6, etc.
Recordemos que cuando aplicamos los aspectos astrológicos, estamos aplicando las divisiones del círculo en números redondos. De este modo la división del círculo por 2 representa a la oposición (180º), por 3 al trígono (120º), por 4 a la cuadratura (90º), por 6 al sextil (60º), por 8 a la semicuadratura (45º), por 12 al semisextil (30º). Estos son los aspectos más comunes. Pero hemos ignorado otros números que son igualmente importantes cuando se aplican en el sentido correcto y para propósitos apropiados.
La división del círculo (se trate del Zodiaco, de las Casas, etc.), por cada número, tiene su propio simbolismo y significado, y este significado yace en el simbolismo del número determinado por el que se divide el círculo. Esto se aplica no sólo a los números menos usados en astrología corriente, como son los números 5 (72º, o sea el quintil), el 7 (muy poco usado, que es de 51º 25' o sea el septil) y el 9 (que es de 40º, llamado nonil), sino a todos los múltiplos de estos números y de cualquiera de los otros números; así que cada fracción del círculo -y hasta las fracciones del mismo minuto- tiene su propio significado. Además, como las divisiones mayores del círculo (como la mitad, el tercio, el cuarto y la quinta) son aún más subdivididas, éstas producen "familias" de intervalos en las armónicas. Cada familia es derivada y relacionada en significado con la división mayor de la que forma parte.
Utilizando la forma de onda, Addey encontró que era capaz de representar periodicidades de innumerables clases y de una gran complejidad, mucho más de lo que puede ser representado por el simple círculo. No trataré de explicar de qué manera "trabaja" la idea de la forma de onda y cómo es confeccionada por este astrólogo. Sería difícil explicarlo aquí y yo simplemente sugiero a quien no esté familiarizado con esta idea, que lea algunos de los artículos publicados en Astrología y el folleto sobre el Renacimiento de la Astrología.**
** Se refiere a una publicación de John M. Addey surgida, en 1971, a raíz de las conferencias en memoria de C.E.O.Carter, en el Fitzwilliam College, de Cambridge. Hay traducción española en la revista astrológica Mercurio-3, nº 9 (primera época), Barcelona, 1988.
Si dos ondas encajan exactamente en un determinado período, se dice que representan la armónica 2ª. Si son 6 ondas las que completan el período, representan a la armónica 6 . Si es una sola, es la armónica 1ª, a veces llamada la fundamental de ese período (como en el caso de nuestro Zodiaco). Esta forma de curva es llamada una onda sinusoide, o en términos matemáticos, la sinusoide. El círculo y la curva en forma de S -o sinusoide-, son realmente uno y lo mismo. Simplemente, ésta última es una modificación matemática o transformación del primero.
Veamos unos pocos ejemplos:
Armónica 3ª del círculo
Armónica 4ª del círculo
Veamos ahora algunas aplicaciones prácticas de las armónicas hasta donde podemos abarcar en esta apretada síntesis a través de esta charla
A nivel realmente científico, Michel Gauquelin demostró la existencia de una relación astrológica de las natividades de los padres con las de sus hijos, en un experimento masivo que incluyó unos 28.000 datos de nacimiento; todos calculados con la hora respectiva. Estos datos fueron publicados. El resultado de este experimento demostró que si uno de los padres tenia cierto planeta ascendiendo o culminando, entonces había una tendencia estadísticamente significativa a que sus hijos tuvieran el mismo planeta en la misma parte de la carta natal. Si ambos padres tenian una posición planetaria particular, entonces la tendencia para el chico a tener la misma era de dos veces mayor. Esto es de conformidad con los principios genéticos, y la probabilidad del resultado de Gauquelin ocurriendo al azar, es menor que 1 en 500.000.
Habiendo demostrado Gauquelin que una relación astrológica existe entre padres e hijos, Addey consideró que esta prueba era todavía inadecuada para explicar las uniones de genética humana en toda su complejidad. No nos detendremos a evaluar todas las consideraciones científicas que llevaron al astrólogo a creer que debía existir una especie de "código astrológico", tal como existe un código genético por el que se transmiten las características generales de generación en generación, aunque entrelazadas de un modo nuevo.
Este código astrológico lo encontró a través de las armónicas; más precisamente en la armónica 5ª. Pero, ¿por qué en la 5ª, y no en la 6ª, 7ª o cualquier otra?. Addey dice que existe una innegable conexión entre el número 5 y el concepto de "dividir" o separar una unidad en partes a través de la actuación de las fuerzas genéticas. Esto es reflejado en el desarrollo en 5 y en 10 partes de la estructura de la molécula de DNA.
La asignación simbólica de este hecho al número 5 se origina en que toda "idea" en su desarrollo completo, "desciende", por decir así, desde su potencialidad a la actualidad en un proceso a través de 9 etapas; la etapa 5ª, que justamente es el punto medio o el que está en el centro de los 9 números, es el punto donde la idea es un todo que se diferencia en partes.
Filosóficamente hablando, esta diferenciación es la que hace posible la manifestación. Recordemos que estas ideas fueron las de Pitágoras y Platón a quienes Addey -como buen pitagórico-, siguió muy de cerca. La razón de por qué Pitágoras y otros filósofos de la antigüedad atribuyeron tanta importancia a los primeros nueve números, proviene de las enseñanzas de que cada cosa se desarrolla desde su idea mas profunda, que es pura potencialidad, hasta su expresión más externa, que es la manifestación de su perfeccionamiento, a través de 9 etapas. Los demás números son la repetición de estos primeros números. En nuestro sistema de numeración usamos sólo 9 números más un símbolo cero para indicar el regreso a la unidad y el comienzo de un nuevo ciclo.
La conexión de la armónica 5ª con la transmisión genética es muy interesante. Addey da el ejemplo de su propia familia, ya que conocía también la hora de nacimiento de su propio padre y por supuesto la propia y la de sus tres hijos. El padre nació con el Sol en punto medio entre Saturno y Urano aproximadamente a 72º entre sí (o sea, una 5ª parte del círculo). El propio Addey lo heredó con ligeras modificaciones y a su debido tiempo, él mismo lo transmitió a sus tres hijos. Veamos el Diagrama 3.
Diagrama 3
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11 Ar/Lib | 23 Gem/Sag | 5 Vir/Pis | 17 Esc/Tau | 29 Cap/Can | |
1) abuelo | Sol 29º45' Can | ||||
2) abuelo | Sol 24º45' Sag | ||||
3) padre | Sol 10 Lib | Sat.23 Sag | Ura 26º15' Can | ||
4) el autor | MC 12 Ari | Sol 23º45' Gem | Sat 6 Vir Ura 5º45' Pis | ||
5) hija 1 | Ura 25 Gem | ||||
6) hijo 2 | Sat 12º30' Lib | MC 23º15' Gem | Sol 2 Vir | ||
7) hija 3 | Sol 11 Ari |
La generación 1 es la del padre de Addey; él es la generación 2 y sus hijos la generación 3. Recordemos que las uniones entre los planetas están relacionadas con la armónica 5ª, cuyos ángulos no sólo son de 72º y 144º, o sea, el quintil (360º/5) y el biquintil, dos veces 72º ó la 2/5 partes del círculo, sino los distintos valores que surgen como fracciones del quintil. Por ejemplo, 36º y 108º, porque ambos están basados en la cuarta parte del quintil y sus múltiplos, o sea, 54º y 90º, porque 18 x 3 = 54 y 18 x 5 = 90. Además, existe un aspecto de 24º porque es un tercio de 72 y hay otro de 45º porque la mitad de 36 que es 18 sumado a la mitad de 54 que es 27 (18 + 27) forman 45º. Todavía hay otro aspecto relacionado con el quintil y es el de 99º (formado por la suma de la mitad de 90º y la de 108º, o sea, 45 + 54 = 99).
Como ustedes ven se puede apreciar la semejanza entre las generaciones 1 y 2; ella resulta ser bastante obvia porque como dijimos, el padre tenia al Sol en el punto medio entre Saturno y Urano con 72º hacia ambos, mientras que el propio Addey nació con el Sol también entre Saturno y Urano; pero en este caso con 108º hacia Urano (o sea 72 + 36, un quintil más medio quintil) y 72º hacia Saturno. La continuación en la generación 3, o sea con sus tres hijos se dan aspectos derivados del quintil (18,24,45,etc.).
Si existe alguna duda al respecto, de que se trata de un modelo verdadero que se repite en las 3 generaciones, la duda desaparece al examinar los grados zodiacales que se hallan involucrados, porque todas estas posiciones muestran que están unidas a puntos del mismo pentágono zodiacal, tal como figura en la figura de más arriba. Para hacer el cuadro de la página anterior se tomó en cuenta sólo al Sol, Saturno, Urano y al MC, a este último como punto importante de referencia.
Hacer este cuadro con los grados ocupados, resultó todavía más interesante porque permitió constatarlo con una generación más atrás; es decir, la de sus abuelos, pues como pueden ver las posiciones del Sol también están involucradas en el sistema pentagonal. Observen que de las cinco zonas, o de los 10 puntos ocupados (11º Aries-Libra; 23º Géminis-Sagitario; 5º Virgo-Piscis; 17º Tauro-Escorpio y 29º Cáncer-Capricornio)los Soles ocupan todas menos una, la de los 17º Tauro-Escorpio. La aparente excepción la produjo su hija mayor (1), y digo aparente porque el Sol de ella está en los 5º de Géminis, o sea a 18º de la zona 2ª, que está en 23º de Géminis. En otras palabras, el Sol está desfasado en un cuarto de la armónica 5ª pero sigue existiendo una relación hereditaria. También puede suceder que al no tener contacto uno de ellos, a través de sus hijos vuelva a la conexión hereditaria primordial : la falta de un contacto hace que se case con alguien que lo tenga para cubrir esa deficiencia.
Con esta demostración, no podemos dudar de que existe un orden, y un orden se caracteriza por la existencia de una ley; un orden que se mantenga a traves del azar no es posible concebirlo. En resumen, la base de la continuidad en estos temas es la armónica y sus subarmónicas. Veamos otras tan interesantes como éstas.
Como ustedes pueden ver, la teoria de las armónicas es simple; si deseamos comprender de qué manera está estructurada una carta natal en función de un número determinado, entonces tenemos que hacer que toda la carta simplemente "vibre", por decir así, de acuerdo con este número. Para esto se divide la carta radical por el número que deseamos examinar e introducir. Por ejemplo, si queremos saber la acción del número 2, introducimos una onda regular de dos partes en la carta, partiendo del 0º de Aries.
El primer ciclo irá de 0º de Aries a 0º de Libra; el segundo ciclo de 0º de Libra a 0º de Aries nuevamente. Si a cada una de estas ondas o ciclos lo consideramos como un zodíaco completo, veremos que tenemos dos puntos con 0º de Aries. Uno esta en el 0º de Aries original y el otro marca el comienzo del segundo ciclo en 0º de Libra en el rádix. Es decir, que todo el Zodíaco se repite a sí mismo dos veces. Pero en la armónica 3ª se repite 3 veces y en la armónica 4ª se repite 4 veces y así sucesivamente.
En cuanto al significado de todos los números, el 2 es el único que probablemente crea menos dificultad. El número 2 da la idea de polaridad, de dualidad, la idea de oposición y tensión. Cuando pasamos al numero 3 y al 4, o sea, los aspectos de trígono y de cuadratura también tenemos algo en que basarnos. El 3 tiene que ver con un estado de armonía y de facilidad para realizar las cosas, mientras que el 4 crea tensión y dinamismo.
Pero cuando consideramos los números 5, 6, 7, 8, 9 y 10, conocemos muy poco acerca de sus efectos y decimos que se trata de aspectos menores y que no tienen mucho efecto; así, dejamos la cosa sin darles mucha importancia. Si preguntamos por los números que siguen, como por ejemplo el 11, el 13, el 17, etc., es peor aún, diremos más bien que no tienen importancia en absoluto.
Pero ahora, con el descubrimiento de las armónicas, llega a ser evidente que cada número tiene su significado y un lugar en el esquema de las cosas; que tomados como un todo, pueden ser la clave de la verdadera comprensión respecto a la propia estructura de la astrología. Recuerdo que alguien dijo cierta vez: la astrología es número. Por supuesto, y le agregaría, es número y ciclos de números. Es lógico que los primeros números como el 2, 3, 4, etc. tengan mucha más importancia que digamos el 83 o el 101, pero cada uno tiene su propio lugar en el esquema de las cosas. Cuanto mas pequeño, más importante es el número de la armónica en términos generales; cuanto más elevado es el número de la armónica, más especializada es el área que probablemente éste describa.
Antes de proseguir, es necesario decir que con las armónicas se pueden realizar cartas astrológicas tal como hacemos con la natal. La idea de hacer cartas de las armónicas a partir de la carta natal, es realmente una idea muy antigua en la astrología. Es la base de aquellas cartas tales como la Navamsa y otras parecidas que son tan importantes en la Astrología Hindú. El punto que hay que tener en cuenta siempre, es que el simbolismo de cada armónica depende del simbolismo del número por el cual ha sido dividido el círculo de la carta original. Así que el significado de la carta de la armónica 4ª, por ejemplo, depende del simbolismo o del significado del número 4; el significado de la carta de la armónica 9ª (que es la carta de los hindues llamada Navamsa) depende del simbolismo o significado del número 9, y así sucesivamente.
De un modo general, si tomamos la carta de la armónica 6ª creo que es la mejor guía para explicar los problemas de salud. Nosotros estamos muy familiarizados con la relación entre el numero 6 y la salud a través de la casa VI y del signo sexto, Virgo. Sin embargo, cada número posee, en función de la totalidad de la naturaleza física, un determinado simbolismo en particular.
Por ejemplo, podemos tomar la armónica 5ª para realizar una carta de armónicas aplicada a la salud también. Las divisiones quíntuples en astrología (tal como el aspecto del quintil) siempre han estado conectadas con la mente, con las facultades mentales, tales como la intuición, la razón, la valoración, el instinto y los sentidos, o sea, un esquema que en total también consta de 5 partes. Ellas son las facultades por las que conocemos y los medios por los cuales recibimos y comunicamos información y conocimientos. En relación con las enfermedades, la carta armónica 5ª tiene una relevancia en cualquier persona que tiene que ver con el deterioro de estas facultades, incluyendo todo tipo de desórdenes nerviosos, cerebrales, defectos en los sentidos o en los órganos del habla y de la comunicación.
Como ejemplo de lo manifestado tomaremos una carta natal famosa: la de Hellen Keller quien fue célebre por su extraordinaria capacidad mental, no obstante haber perdido la vista y haberse quedado sorda y muda como resultado de una fiebre escarlatina a la edad de 1 año y 7 meses de vida. Había nacido el 27 de junio de 1880 alrededor de las 16 hs. en la localidad de Tuscumbia, estado de Alabama, Estados Unidos.
Observando la carta natal bien podríamos preguntarnos por qué sufrió semejantes calamidades en la infancia, sin vista y con el oído destruido, dejándola totalmente aislada de la comunicación con todos y con cada cosa. Probablemente, la única y más importante indicación de la privación de la percepción, sea la estrecha cuadratura de Mercurio con Saturno, siendo este último el corregente de la Casa III, la del mental concreto. Plutón, cerca de la Casa VII, es posible que esté mostrando las grandes dificultades que ella tuvo que afrontar para poder manejarse con el exterior. Otro planeta importante es Urano cerca del MC, pero sus aspectos son buenos, con sextil al Sol y a Venus. Realmente, no es un tema como para suponer la extremada gravedad de las condiciones que ella padeció.
A fin de conocer el verdadero daño físico de los sentidos, generalmente se necesita ir más allá de la carta de la armónica 5ª; por ejemplo, la armonica 25ª (o sea, el cuadrado de 5) o la 125ª (o sea, el cubo de 5) ya que la 5ª indicará sólo si existe algún peligro verdadero para las facultades de los sentidos o su pre disposición.
El método de preparar una carta armónica es sencillo. En primer lugar se convierte la longitud zodiacal de cada posición radical en grados de longitud absoluta, o sea, desde 0º de Aries. En segundo lugar se multiplica esta longitud por 5 (dado que es la armónica 5ª), luego se restan los múltiplos de 360º tantas veces como sea necesario para tener una cifra en grados menor de 360º. Finalmente, el resultado, convertido nuevamente a longitud zodiacal, es la armónica 5ª. Así se calculan todos los planetas. El cálculo del ASC se hace de la misma manera, pero el resto de las cúspides no, éstas tienen el mismo grado del ASC en cada signo sucesivo a partir de este último. Es decir, se emplea el método de casas iguales. En cambio el MC se calcula aparte y se introduce en la carta como si fuera un planeta. Cuando todas las posiciones de la carta radical han sido transpuestas a sus posiciones de la armónica 5 , incluyendo al ASC y MC, se levanta la nueva carta. Ni el ASC ni el MC -que pueden caer en cualquier parte de la carta- representan ahora un verdadero ASC o MC de tipo espacio-temporal. Ellos son puntos meramente simbólicos que corresponden en significado a los puntos originales. La carta de la armónica 5ª de Hellen Keller es la que se muestra a continuación.
Observando esta carta encontramos varios rasgos notables. El nuevo ASC cae sobre el Sol radical *** sugiriendo que estamos tratando con alguien de considerable fuerza mental.
*** Esto probablemente es falso, aunque tiene escasa relevancia para la argumentación. Obsérvese que el propio Dumon ha dicho más arriba que Hellen Keller nació "alrededor de las 16 hs". Por tanto, se trata sólo de una hora aproximada. Supongamos que la hora real discrepa de ésta en unos 15 ó 20 minutos. Puede haber un error de 5 grados en el ascendente. Al multiplicar esto por 5, el error se acumula hasta los 25 grados (y hasta más de 600 grados de error en la armónica 125). Dumon tampoco fue excesivamente cuidadoso en determinar las coordenadas geográficas de Tuscumbia, lo cual también altera las cúspides de las casas.
En segundo lugar, existen tres poderosas oposiciones : Sol en oposición a la Luna, que muestra la posibilidad de una gran tensión interna o una division profunda entre las facultades mentales en su acción interna y externa. Esta oposición cae sobre Mercurio radical. La segunda oposición es entre Urano y Mercurio, y ésta cae cerca de la cuadratura con el MC radical. La tercera oposición es de Marte con Saturno, la que realmente indica ya que esta desagradable oposición cae con Saturno sobre el Marte radical. Aquí tenemos algunas indicaciones verdaderas de que Mercurio en cuadratura con Saturno en la carta natal sea propenso a ser mucho más serio de lo que puede suponerse y que la nativa puede sufrir un grave daño en las facultades de percepción y comunicación. El origen del problema en este caso es Marte radical, que tiene que ver con la fiebre escarlatina.
Algunos ejemplos de cálculo
Sol 6º 31' Cáncer = 96º 31'
96º 31' x 5 = 482º 35'
482º 35' - 360º = 122º 35'
Armónica 5ª Sol = 2º 35' Leo
ASC 25º 30' Escorpio = 235º 30'
235º 30' x5 = 1177º 30'
1177º 30' - 1080º = 97º 30'
Armónica 5ª ASC = 7º 30' Cáncer
MC 7 Virgo = 157
157 x 5 = 785
785 - 720 = 65
Armónica 5 MC = 5º Géminis
La carta de la armónica 5ª divide al Zodíaco en 5 partes iguales de 72º cada una, las que unidas en una carta revelan las relaciones de la 5ª parte del círculo. Las oposiciones (o sea, la mitad del arco de 72º) del Sol con la Luna; de Mercurio con Urano y de Marte con Saturno, significan que estos pares de planetas tienen una relación en la carta radical de semiquintil, o sea, de 36º. Si observamos la distancia entre el Sol y la Luna natal hay 108º (o sea, 36º x 3), entre Mercurio y Urano hay 36º exactos y entre Marte y Saturno, otra vez 108, todos dentro de menos de 1º de orbe.
Exactamente en el mismo sentido, la carta armónica 25ª, o sea la 5ª al cuadrado, muestra las relaciones de la división del radix en 25 partes de 14º 24' cada una y la carta armonica 125, o sea, la 5ª al cubo, mostrará las relaciones con la división del radix en 125 partes de 2º 52' cada una. Por supuesto, que no queremos entrar en detalle en cada una de estas cartas porque nos llevaría mucho tiempo y por eso resumiremos. El cálculo de estas cartas, lógicamente se hace más complicado a medida que la armonica crece, pero con la aplicación de las calculadoras electrónicas de bolsillo, o mejor aún, con una computadora programable, en pocos minutos podemos obtener unas cuantas armónicas de una carta natal.
Con el objeto de mostrar lo tremendamente significativas que pueden ser estas cartas, mostraré una prueba con 9 cartas natales de personas ciegas a quienes se les calculó la armonica 125 para el planeta Mercurio, el que como ustedes saben es un planeta conectado en general con el sistema nervioso, con los sentidos y especialmente la vista. También se calculó esta misma armónica para los planetas maléficos: Marte, Saturno, Urano y Neptuno. Los resultados están a la vista, como pueden observar en el cuadro:
NUEVE PERSONAS CIEGAS - ARMÓNICA 125ª | ||||
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Caso 1 | Mercurio | Cuadratura | Saturno | orbe 1' |
Caso 2 | Mercurio Mercurio | Cuadratura Cuadratura | Marte Neptuno | orbe 1' orbe 3' |
Caso 3 | Mercurio | Cuadratura | Saturno | orbe 1' |
Caso 4 | Mercurio Mercurio | Oposición Sexquicuadratura | Neptuno Saturno | orbe 2' orbe 1' |
Caso 5 | Mercurio Mercurio | Cuadratura Oposición | Marte Saturno | orbe 1' orbe 1' |
Caso 6 | Mercurio Mercurio | Cuadratura Oposición | Marte Saturno | exacto orbe 2 |
Caso 7 | Mercurio Marte | Oposición Cuadratura | Urano Saturno | orbe 2' orbe 1' |
Caso 8 | Mercurio Mercurio | Cuadratura Semicuadratura | Neptuno Marte | orbe 1' orbe 1' |
Caso 9 | Mercurio Mercurio | Semicuadratura Oposición | Marte Saturno | exacto orbe 2' |
Esta lista tal vez sea la más impresionante que yo haya visto en un estudio astrológico. No solamente merece fe por la seriedad del astrólogo que la publicó, sino que los datos de nacimiento fueron extraídos de una revista de astrología que fuera publicada muchos años antes de que se supiera la existencia de estas técnicas.
Si aplicamos la armónica 125 al tema de Hellen Keller tenemos a Saturno en 2º 55' de Libra en conjunción al Sol en 4º 35' de Libra y en cuadratura con Mercurio en 1º 15' de Capricornio. ¿Qué significa esto, en términos de la carta radical? La división del círculo de 360º por 125 da un incremento de 2º 52,8'. Esto puede ser considerado como un micro-aspecto que tiene especial referencia, entre otras cosas, con los sentidos físicos, especialmente en relación con Mercurio.
En la carta de Hellen Keller, el ángulo entre el Sol y Saturno radical es de 69º 08' y esto resulta ser menos de 1' de diferencia con el múltiplo exacto de 2º 52,8' (porque 24 x 2º 52,8' = 69º 07,2'). Así que existe un contacto exacto. Esto, pasa también con Mercurio que está en 0º 15' de Leo en el natal y se encuentra a 2º 52' de distancia de la cuadratura con Saturno en 27º 23' de Aries y de este modo en la armónica 125 están de nuevo en cuadratura, pero ahora con un orbe menor de 1'. Estos son los orbes radicales que fueron listados en la gente ciega del anterior cuadro.
Los resultados muestran que el principio de la división en armónicas del círculo, puede conducir a una exactitud mucho más allá de la reconocida comunmente en astrología. Por supuesto, esto significa que si uno hace la transposición a la armónica 125, debe ser cuidadoso en calcular las posiciones radicales con la mayor exactitud posible. Todo error en el radix se multiplica 125 veces. El error de 1' llega a ser un error de 125' (o sea de 2º 05') en la armónica 125. En cambio, en armonicas muy bajas, los aspectos cerrados del radical se vuelven a repetir aunque en signos y casas diferentes. Una conjuncion de 10' sigue apareciendo en las armónicas 2, 3, 4, 5 y hasta en la 15 con 2º 30' de orbe.
Hasta aquí hemos tratado de demostrar las grandes posibilidades que existen de una conexión entre el código astrológico y el código genetico. También se ha querido demostrar cómo el simbolismo del numero 5 está relacionado con la mente y con las facultades genéticas en el hombre, sobre todo en el aspecto inferior, como son los sentidos, y que evidentemente están relacionados, por ser inferiores, con las subarmónicas del numero 5. De este modo, las enfermedades y los daños que afecten a los órganos de la percepción o los sentidos pueden hallarse mediante el estudio de las divisiones por 5 en la natividad.